Estimadas y estimados… Rukit@s tod@s…
Basta de Cenicientas… basta de Blancas Nieves… basta de Bellas Durmientes…
Eduquemos para la igualdad.
Vivamos en y para la igualdad.
Que no se nos olvide. Podemos ser un ejemplo a seguir.
Saludicos de colores.
Ruka de Colores by Vero Tapia ©
Ruka de Colores 
El problema no es Blancanieves, Cenicienta o la Bella Durmiente. La persona que crece leyendo cuentos suele ser respetuosa y desarrolla una mente abierta y crítica. Yo diría que basta de programas televisivos, anuncios y mensajes que exaltan una femineidad y una masculinidad mal entendida. Hace más daño una campaña de moda que todos los cuentos de los Grimm reunidos.
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Estimada Nona. Nuevamente miramos por las mismas «lupas binoculares». 🙂
Los cuentos son hermosos y nunca deben dejar de existir. No pensaba en eso…
El problema está en la utilización de los mismos…
Cuando escribí esas palabras reflexionaba por ejemplo en el tremendo daño que nos ha hecho «Walt Disney» a las niñas y futuras mujeres, y a los niños y futuros hombres.
Esas películas no han ayudado a cambiar o cuestionar los valores patriarcales que justifican la desigualdad. Los han reforzado… Mujeres sumisas que sólo son algo sí tienen a su lado un hermoso «príncipe azul»… Búa… 😦
Que los Grimm me perdonen por las palabras e ideas mal escritas y pensadas que pueden llegar a generar grandes confusiones…
Besicos de colorines colorados. 🙂
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Como tú, creo que Disney no es del todo inocuo, pero me preocupa mucho más el ejemplo diario que una película, o cien, o mil.
Crecí con las pelis de Disney (y confieso que me siguen gustando), pero en mi casa vi el ejemplo de mi madre: trabajadora, lectora, independiente y feminista; y el de mi padre, que siempre quiso a sus hijas libres, autónomas y fuertes y creo que eso pesó más en mí (en nosotras) que las princesas, porque supimos separar realidad de fantasía.
¿Acaso el que lee novela negra se convierte en asesino en serie?
Bajo mi punto de vista, la raíz del problema es mucho más profunda. Pero es solo mi opinión 😉
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Ufff…
En esto también estoy de acuerdo contigo. Es algo tan normalizado que a la que te descuidas, te quedas atrapada en la oscura telaraña…
Me gusta escuchar y leer a Humberto Maturana ya que entrega una posible explicación al problema. Me reconfortan sus palabras…
Ojalá entre tod@s podamos cambiar las cosas. Por nosotr@s, por los cachorritos, por la naturaleza que pacientemente espera el cambio, por la felicidad, por la vida, por la libertad…
Gracias por regalarme tus palabritas y tus ideas Nona. No sabes la grata compañía que me hacen.
Besicos de arcoíris 😛
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Perdona, pero es que me pongo muy vehemente con este tema. Me molesta mucho que consideren ciertas cosas machistas y no comprenden que llevar a una niña con una melena hasta la cintura (¿cómo demonios hará deporte?), las uñas pintadas (¡mira, como mamá) o una faldita que se le sube hasta las orejas cuando se tira por el tobagán (no me tiro por el tobogan, no porque tenga miedo, sino porque no quiero quemarme el culete) es más machista, la coarta más y la marca más que ver un cuento. ¡Mejor no sigo!, que sale mi parte de ogra 😀 😀 😀 😀 ¡Besazos, rukita!
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Olé, Olé Nona 🙂 ¡¡¡Bravo!!! 🙂
Estoy totalmente de acuerdo contigo.
El problema no son los cuentos…
Los cuentos son unos grandes amigos y compañeros de vida. ¿Qué sería de nosotras sin los cuentos? No me lo quiero ni imaginar. *_*
Ojalá que poco a poco o a toda velocidad la desigualdad y discriminación cambien. Cruzo los dedos para que así sea.
Yo por mi parte, aquí estoy intentando poner un granito de arena que vaya cambiando esta playa.
¡¡Ahhhh!! Es un enorme placer conocer a esa Ogresa que convive contigo. Estoy encantada de que siga diciendo lo que piensa y que me estire de las orejas y me remueva los pajaritos de colores de la sesera, las veces que haga falta. ¡¡Gracias!!
Besitos de jueves nublado y lluvioso 😉
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🙂 Tú has dado con la clave, el cambio son pequeñas acciones que cada una de nosotras debemos llevar a cabo… Educando a los padres, los maridos, los hijos, los amigos… Ese granito de arena que algunas de nosotras ponemos, formará una gran playa. ¡Gracias por tener la cabeza llena de pajaritos de colores! Un millón de abrazos en un viernes, también nublado y lluvioso 😀 😀 ¡¡Y no es broma!!
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